Cuando ya estés llegando al final del proceso de mezclar la vocal con las demás pistas que componen tu canción, tienes que comprobar qué muestras de voz tienes que grabar o cuáles tienes que recibir por parte de un cantante, clasificar las diferentes tomas y sus agrupaciones, entendiendo con cuáles debes quedarte, cuáles debes mezclar, etc.
Cuando tengas todas tus pistas es fundamental que las ordenes, agrupándolas por los diferentes tipos de muestras que sean, una buena forma de ordenarlas es cambiar el nombre y el color de las pistas para diferenciarlas rápidamente.
Es necesario que tus pistas vocales principales sigan una coherencia y cohesión, es decir, debes aplicar los mismos efectos a estas pistas para que tengan sentido entre ellas.
Por supuesto, hay efectos que no todas las pistas deben tener o necesitar, como por ejemplo el Autotune. Eso tendrás que valorarlo por ti mismo.
Cuando acabes de añadirle los diferentes efectos a tus diferentes vocales debes exportarlas para continuar siguiendo el orden que te comentábamos al principio.
El equilibrio, al igual que el orden, es muy importante a la hora de tener preparadas todas tus pistas vocales.
Ordena todas tus vocales y diferencia cuáles son las secundarias y las principales a la hora de equilibrar las ganancias.
Igual ocurre con el posicionamiento estéreo, panea hacia la izquierda o derecha para dar más espacio a las muestras principales que normalmente se quedarán en el centro (C).
Cuando completes el paso de equilibrar ganancias, paneos y aplicar efectos tienes que comprobar que cada pista está en su sitio (con respecto al ritmo) correctamente para no perder tiempo más tarde arreglando este fallo.
Comprueba que todas tus pistas no tienen partes que sobren, si ocurre esto elimina las partes que consideres necesario eliminar.
Nos adentramos en el proceso de acabar de mezclar todos los elementos de nuestra canción, concretamente las muestras vocales con las demás pistas que la componen.
Comparar como quedan las vocales con el resto de elementos de tu tema no es un paso obligatorio, puesto que tus vocales ya están comprimidas, limitadas, etc., por lo que no vas a mezclarlas directamente con las demás pistas.
Esta comparativa es positiva, ya que te va a servir para ver cómo encaja tu vocal con la instrumental, por si hay algún fallo en el transcurso del tema como, por ejemplo, el enmascaramiento de un instrumento con respecto a la vocal.
Si ves que todo suena bien sólo tendrás que hacer algunos ajustes de ganancias antes de exportar la vocal final (maestra), la cual masterizaremos junto a la versión masterizada de la instrumental.
Como te hemos comentando, es fundamental tener equilibrio en las ganancias para que los elementos encajen en su posición correcta.
Comprueba que los diferentes elementos se escuchan con el nivel adecuado y que no enmascaran a la vocal o vocales principales.
A la hora de ir comprobando como conectan las diferentes muestras vocales con la parte instrumental, analiza e identifica si necesitan algún efecto más.
Cuando hayas completado los pasos anteriores, exporta las diferentes muestras vocales en una sola, la cual es conocida como vocal maestra o vocal acapella final.
Esta las mezclarás con la instrumental en la parte de la masterización.
Y hasta aquí todo el proceso para que compruebes que las vocales están correctas y así poder mezclarlas juntos a las demás pistas.
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